La Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA) y sus miembros continúan apoyando todas las medidas que los Estados consideren necesarias para frenar esta carrera contra la diseminación global del Coronavirus.
Sin embargo, este es un momento de gran presión sobre la industria, por lo que IATA insto a los gobiernos a que estén preparados para la gran repercusión económica que tendrán estas restricciones, para que respondan con rapidez a la gran fragilidad financiera de las aerolíneas que estas medidas ya están generando y para que sigan las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud.
Por su parte, el consejero delegado de la IATA, Alexandre de Juniac, dijo que “Estamos ante una situación extraordinaria y los Gobiernos están tomando medidas sin precedentes. La seguridad —incluida la salud pública— se considera siempre una prioridad máxima. Las aerolíneas están cumpliendo con estos requisitos. Los Gobiernos también deben reconocer que las aerolíneas —que emplean a unos 2,7 millones de personas— están sometidas a fuertes presiones financieras y operativas. Necesitan apoyo”.
Y también agrego que “Los Gobiernos deben establecer las medidas que consideren necesarias para contener el virus. Y deben estar totalmente preparados para proporcionar apoyo y para amortiguar la consiguiente alteración económica. En una situación normal, el transporte aéreo es un catalizador para el crecimiento económico y el desarrollo. Suspender los viajes a una escala de tanta magnitud provocará consecuencias negativas en la economía global. Los Gobiernos deben ser conscientes de esto y estar preparados a prestar apoyo”
La viabilidad financiera de las aerolíneas, en Jaque
En un apartado especial, refiriéndose puntualmente a la gran fragilidad financiera de las aerolíneas, el Sr. de Juniac reafirmó que “Esto generará enormes presiones de liquidez para las aerolíneas. Ya hemos visto el cierre de Flybe. Y este último golpe podría empujar a otras aerolíneas en la misma dirección. Las aerolíneas necesitan medidas urgentes para superar esta crisis. Los Gobiernos deben tratar de encontrar todas las soluciones posibles para ayudar a la industria en unas circunstancias tan extremas. Ampliar las líneas de crédito, reducir los costes de infraestructura, aligerar la carga fiscal, todas ellas son medidas que los Gobiernos deben explorar. El transporte aéreo es vital, pero sin el salvavidas de los Gobiernos sufriremos una crisis financiera sectorial que se sumará a la emergencia de salud pública”
La Organización Mundial de la Salud, si bien apoya las medidas que los gobiernos tomen para frenar la diseminación del COVID-19, sigue desaconsejando las restricciones tan radicalizadas a los viajes o al comercio entre los países que padecen el brote. En este sentido, el Sr de Juaniac insto a los gobiernos a seguir las recomendaciones de la OMS, organismo que el 29 de febrero de 2020 publicó una revisión de sus recomendaciones, entre las que incluía la siguiente: “Las medidas en materia de viajes que interfieren considerablemente en el tráfico internacional solo pueden justificarse al inicio de un brote, ya que pueden permitir a los demás países ganar tiempo, aunque sólo sea unos pocos días, para aplicar rápidamente medidas de prevención eficaces. Esas restricciones deben basarse en una cuidadosa evaluación de los riesgos, ser proporcionales al riesgo para la salud pública, ser de corta duración y someterse a revisión periódicamente a medida que la situación evoluciona”
Air Cargo Latin America
