Foto: Air Canada Cargo
Salvo algunas pocas excepciones, históricamente el negocio de cargas tuvo poca atención por parte de los altos ejecutivos de las líneas aéreas. No fue hasta la irrupción de la pandemia causada por el Covid-19, cuando todas las aerolíneas fueron forzadas a reducir sus operaciones de pasajeros, que estas vieron en la actividad de cargas el principal vector para generar ingresos, y así intentar aportar algo de cash a sus tan deterioradas finanzas.
Debido a la pandemia, el flujo global de pasajeros se ralentizó hasta niveles nunca imaginados ni por el analista más pesimista. Fue por esta razón que la gran mayoría de los operadores aéreos debieron ser creativos y comenzaron a utilizar parte de sus flotas de aviones de pasajeros para transportar carga exclusivamente. Al inicio, solo utilizaban las bodegas inferiores (bellies) de los aviones de fuselaje ancho (wide bodies). Mas tarde, con el auge del trafico de PPE (Personal Protection Equipment), comenzaron a montar cajas sobre los asientos de los pasajeros y en los head bins, aprovechando que estas cajas tenían dimensiones uniformes y eran muy livianas.
Mientras esto sucedía, las aerolíneas sometieron al análisis de las distintas autoridades aeronáuticas y de seguridad protocolos técnicos para obtener autorización y poder remover los asientos de los pasajeros para montar cajas directamente sobre el piso de la cabina superior. Esto aumentaría la capacidad disponible (en volumen y peso) para el transporte de cajas. IATA (International Air Transport Association) ayudó mucho a que esto se haga realidad, al punto que actualizó su guía para el transporte de carga y correo en aviones configurados para el transporte de pasajeros, para poder así montar carga en la cabina de pasajeros en forma segura.
Siguiendo el correlato del primer párrafo de este artículo, la actividad de cargas aéreas ya no es considerada como algo marginal, sino como una actividad con el potencial de generar ingresos (y utilidades) sostenibles en el tiempo, especialmente mientras sigan las restricciones a la libre circulación de personas.
Gracias a todo lo sucedido y a lo nefasto que resultó la pandemia, nuestra industria resultó fortalecida, especialmente con el crecimiento exponencial que se espera tenga el comercio electrónico y la demanda de capacidad para la distribución de la vacuna contra el Covid-19. Tanto así que muchas aerolíneas decidieron relanzar sus unidades de negocio de cargas, planificando la incorporación de aviones cargueros. Como mencionamos mas arriba, la mayoría de las aerolíneas tiene aviones de pasajeros sentados en tierra, y como no se espera una pronta recuperación de la actividad de pasajeros, en muchos casos la decisión es convertir parte de la flota de estos aviones en cargueros.
Un claro ejemplo de esto es Air Canada (AC), quién informó que para fines del próximo año tiene la intención de tener siete cargueros en operación, y está a punto de lanzar oficialmente un servicio de comercio electrónico. «La carga será una parte cada vez más importante del futuro de Air Canada«, dijo el presidente y director ejecutivo saliente Calin Rovinescu esta semana, tras la publicación de los resultados del cuarto trimestre y del año completo de la compañía para 2020. Cuando anunció la decisión de convertir dos B767-300ER en una configuración totalmente de carga, la gerencia insinuó planes para agregar más 767 convertidos a la flota, pero no dio a conocer ningún detalle aún.
Según el director financiero y director ejecutivo adjunto Michael Rousseau, quien reemplaza a Rovinescu, el plan es que estos aviones (siete en total) funcionen en el cuarto trimestre del 2022. Los dos primeros cargueros deberían estar listos para la temporada alta de este año, llegando en agosto/septiembre y octubre, dijo Jason Berry, vicepresidente de carga.
Por el momento, Air Canada Cargo depende en gran medida de los aviones de pasajeros desplegados en misiones de carga, especialmente cuatro 777 y tres A330, a los que se les han quitado los asientos para usar la cabina y la bodega para carga. Air Canada ha realizado unos 5.000 vuelos solo de carga con sus aviones de pasajeros, los que desempeñaron un papel enorme en el impulso de los resultados de la unidad de negocio carga.
Los ingresos por carga aumentaron un 53% interanual en el cuarto trimestre 2020, hasta alcanzar los 286 millones de dólares canadienses (225,24 millones de dólares estadounidenses). Para todo el año, los ingresos por carga superaron los C$ 920 millones, un aumento del 28%.
Además de sus planes de carga, Air Canada Cargo también incursionará en el ámbito del comercio electrónico. Lucie Guillemette, vicepresidenta ejecutiva y directora comercial, informó que la compañía había comenzado las entregas de comercio electrónico a residencias en el cuarto trimestre. «Esperamos lanzar oficialmente una plataforma de marca pronto«, dijo.
Operando con socios para manejar la primera y última milla de envíos de paquetes, el servicio de comercio electrónico de AC se encuentra en la etapa piloto. “El modelo está diseñado para aprovechar la mejor red aérea nacional de Canadá. Podemos mover los envíos nacionales más rápido que nadie”, dijo Berry.
Air Cargo Latin America