Fuente: VINCI Airports
La autoridad de la aviación civil brasileña ha otorgado la concesión por 30 años para operar el aeropuerto de la ciudad de Manaos, en la amazonía brasileña, a VINCI Airports. La nueva gestión comenzó a operar formalmente el 12 de enero, y es el resultado de un acuerdo firmado en abril pasado.
La expansión de VINCI Airports en Brasil alcanza también a los aeropuertos de Porto Velho, Rio Branco, Boa Vista, Cruzeiro do Sul, Tabatinga y Tefé, los que se unirán a la cartera del operador en febrero de 2022.
«El aeropuerto de Manaus es el tercer aeropuerto más importante de Brasil en el manejo de cargas, y es una parte muy importante del desarrollo económico y social de la Amazonía. Por esta razón, VINCI Airports hará foco en el desarrollo de esta actividad, optimizando su funcionamiento.»
Otro tópico que abordará VINCI Airports es el cuidado del medioambiente, desplegando su plan de acción ambiental en la Amazonía. Para lograr este objetivo, reducirá las emisiones de CO2 del aeropuerto mediante la construcción de un parque solar, así como mejorará su gestión del agua y los residuos. Similares iniciativas ambientales a las que el operador aeroportuario aplicó en el aeropuerto de Salvador cuando tomó la concesión en 2018, convirtiéndolo en el aeropuerto más sostenible de Brasil.
Nicolas Notebaert, CEO de VINCI Concessions y Presidente de VINCI Airports, declaró: “VINCI Airports se enorgullece de ser el nuevo operador del aeropuerto de Manaus y otros seis nuevos aeropuertos en el bloque norte. En esta región de Brasil, compuesta en gran parte por bosques y ríos, el transporte aéreo es fundamental para la movilidad de las personas y las cadenas de suministro. Aplicaremos nuestra experiencia desde un punto de vista operativo y ambiental, con miras al desarrollo sostenible. Estamos renovando nuestra asociación con Brasil para hacer de esta concesión un nuevo éxito, aprovechando los resultados muy positivos que hemos obtenido en Salvador de Bahía”.
En línea con esta política de sostenibilidad, también implementará un programa de sumidero de carbono forestal, para secuestrar sus emisiones residuales de CO2, mientras ayuda a proteger la selva amazónica y la biodiversidad.
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