Los productores de arándanos prevén que las exportaciones de esa fruta se iniciarán entre el 10 y el 15 de septiembre, tras la reapertura del aeropuerto Benjamín Matienzo. Según estimaciones del sector, se espera que el volumen enviado a los mercados internaciones rondará las 5.500 toneladas.
En 2016, la producción alcanzó unas 8.500 toneladas y se exportaron alrededor de 5.500. Estados Unidos representó el 74% de los envíos; Inglaterra, un 14 %; el 10% el continente europeo y el 2% al resto del mundo.
“Se esperan precios más ajustados debido a la fuerte incursión de Perú en el mercado”, manifestó Francisco Estrada, titular de la Asociación de Productores de Arándanos de Tucumán (Apratuc).
De acuerdo con los últimos datos privados, la superficie cultivada hasta mayo de este año alcanzó las 1.338 hectáreas (ha), entre Tucumán, Salta y Catamarca. En la provincia se registraron 1.123 has, unas 21 has más que en 2016.
En Salta la extensión fue de unas 180 hectáreas. En Catamarca se relevaron unas 13 hectáreas más que en 2016, lo que elevó la zona cultivada hasta las 34 hectáreas.
En Tucumán, la mayor proporción de los campos se ubicaron en los departamentos de Monteros y Chicligasta, acumulando un total de 804 hectáreas entre ambas localidades, según el relevamiento del sector en el NOA, que fue presentado semanas atrás.
El viernes se reabrirá el aeropuerto de la provincia, tras tres meses de trabajos de infraestructura. El proyecto incluyó la reconstrucción de la pista de aviones, la mejora de la plataforma comercial, las calles de rodajes que conectan con la pista y la instalación de un sistema de balizamiento.
El año pasado se concretó la construcción de la plataforma comercial, que es utilizada por los aviones de carga para la exportación de arándanos, lo que elevó la capacidad de trabajo en el Benjamín Matienzo